4.9.15

Reseña: Bloodlines (Bloodlines, #1) by Richelle Mead

BLOODLINES

Autor: Richelle Mead
Año de Publicación: 2011
Idioma: Inglés 
Editorial: Penguin Young Readers Group


Cuando a la alquimista Sydney le es ordenado proteger la vida de la princesa moroi Jilll Dragomir, el último lugar al que espera ser enviada es una escuela privada para humanos en Palm Springs, California. Pero en su nueva escuela, el drama sólo acaba de comenzar.
Poblada con nuevas caras y algunas familiares, Bloodlines explora toda la amistad, romance, batallas y traiciones que hicieron del tan adictivo Vampire Academy el #1 en la lista de los mejores libros del New York Times… ahora el escenario es en parte vampírico, en parte humano donde las apuestas son incluso más altas y todos saldrán por sangre.  

Después de la manera en que me enganché a Vampire Academy, era un crimen que aún no hubiera leído el spin-off de esta serie. ¡No tengo perdón! Por eso esta noche acabé con ojeras, me lo leí completo.
¡Me ha mantenido atrapada hasta las cinco de la madrugada!
Así que agradezco que tuviera fiesta... menos mal. Todo comienza cuando Sydney Sage tiene la oportunidad de limpiar su nombre acudiendo a una importante misión, proteger a la princesa Jill dentro de una academia humana, hasta que los problemas políticos se solucionaran. 

La historia nos adentra dentro de la cabeza de Sydney, a la cual ya la conocíamos desde VA. Siempre me agradó mucho, pero hasta entonces había tenido la oportunidad de conocerla mejor. Gracias a ella conoceremos un poco mejor qué son los alquimistas, cómo piensan, se instruyen y viven. 

Pronto descubrimos que sus problemas, mostrados muy superficialmente en Vampire Academy, son en realidad más graves de lo que aparentaban, su padre es muy estricto, y a eso se le suman los problemas de sus hermanas...

Adrián continua siendo nuestro sexy moroi, (los que leísteis VA ya lo conoceis!) pero ahora se desarrollara en un rol más importante. Al igual que Eddie, al cual ya le teníamos aprecio (y si no se lo tienen, se lo tendrán en cuanto lean la primera saga).

Un personaje interesante es Jill. En VA nunca le presté ninguna atención (no me hacia ni fu ni fa, que queréis que le haga...), aquí nos la topamos como uno de los principales personajes, así que me vi obligada a entenderla, aunque sus historias de niña adolescente se me hicieron un poco molestas al principio.

Mi pobre Adri, con lo chof que me dejó en VA, a ver con que sale en esta saga! Tengo que confesar que empezé el spin-off solo por él (suspiro), y en este primer libro ya me ha sacado más de una sonrisa, como acostumbra a hacer. 
Puedo añadir que comprendí perfectamente ese problema de Sydney para entender indirectas o relacionarse con la gente (no porque haya sido entrenada como alquimista ni nada por el estilo, simplemente soy así). Ella es muy inteligente y es menos impulsiva que las otras protagonistas de Mead, pero no por eso menos valiente. 

Respecto a la relación que tiene VA con Bloodlines, quizás no sea necesario leer la saga antes que el spin-off, aunque yo leí todo en orden, sin embargo puedo garantizar que esto no es una continuación en estricto rigor, a pesar de estar ambientado en el mismo universo, tiempo después de lo ocurrido en los otros libros. Bloodlines nos da a conocer un argumento casi casi completamente nuevo, con las mismas bases y distinta trama. La única advertencia es que, si lees este spin-off antes que VA, te darás mucho spoiler sobre lo que ocurre en la historia contada por Rose, así que te recomiendo que la leas a ella primero, y luego vengas a ver qué tiene Sydney para contar. 

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